y en
su posición más comprometida.
Broto del cristal
una dentellada audaz,
se despide lo reflejado
en tantos trozos repetidos
igual que un pájaro
tras otro
es un augurio de otro tiempo.
Las entrañas que miran el cuerpo hacia
dentro
hacia afuera
hacia adentro
afuera.
Hoy se paga con traición
la felicidad
pero Roma sigue eterna.
No hay comentarios:
Publicar un comentario