jueves, 4 de octubre de 2018

Polillas

Explícale
a una polilla
lo que es arder
de noche.

Oscuro, envuelto.
Sin el halo inquieto
de los fallos
fluorescentes.

Todos los autobuseros
tienen el mismo apellido,
una dirección en el pecho
de pertenencia.

Quien viaja por el fuego,
A menudo, y otras no tanto,
intenta secuenciar las chispas
que crepitan.

Hoy el diésel está caro.

Han vuelto a quemar
otra bandera, y la locura
solo radica en lo que prende
una imagen.

Qué desperdicio.

A cuantas polillas podría
domesticar solo con el
odio apagado de una bombilla.

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