Y entonces:
la jaula permanente,
los cuarteles de invierno
son como una espora
invertebrada.
También
lo intenté,
ahogar el agua, digo.
Sujeté fuerte su garganta
transparente,
el extraño traje que nos deja
siempre su rastro indoloro.
Preguntaste
si alguna vez
se asfixian los colores.
Y entonces,
y ahora,
y siempre.
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