El eco
crujiente
de los huesos
araña
internamente
el crecimiento
de mi carne hacia la tuya.
Ya no son cuerpos
divididos en
una mitosis perfecta.
Deja de creer como un apóstata.
No existe
aquello en lo que no crees;
Ni tampoco, aún, y negándolo tres veces.
Puede dejar de existir
aquello que tardamos en demostrar.
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